Partes de un taladro

El taladro es una herramienta que cada vez más usuarios se deciden a utilizar tanto en su día a día como a nivel laboral. Si quieres conocer más sobre los taladros te recomendamos continuar leyendo, porque a continuación te contamos cuáles son las principales partes de un taladro eléctrico y te presentamos algunos consejos de uso para poder utilizarlo de manera segura y con las mejores garantías, como los profesionales.

Fuente de energía

Una de las partes más importantes de los taladros eléctricos es la fuente de energía. Los taladros pueden ser eléctricos y funcionar con cable o ser inalámbricos y funcionar a batería. Los taladros eléctricos cuentan con una duración de uso ilimitada, mientras que las baterías de los taladros inalámbricos tienen que recargarse.

De esta manera, los taladros eléctricos podemos organizarlos por amperios, mientras que los taladros inalámbricos se clasifican según sus voltios. Cuanto más potente sea un taladro, mayor será su amperaje o su voltaje. Cuando un taladro tiene más potencia podrá contar con mayor par de torsión o con mayor fuerza de rotación.

El percutor

Por otro lado encontramos el percutor, que normalmente aparece indicado en los taladros con el símbolo del martillo. Para taladrar materiales homogéneos como metales, madera o plástico, habrá que desconectar el percutor. En cambio, se trata de una parte del taladro necesaria para taladrar hormigón, paredes o ladrillo, entre otros materiales similares.

El motor

Sin duda la parte más importante de los taladros eléctricos o inalámbricos es un motor, ya que determinará la potencia y la velocidad del taladro, tal y como nos han explicado los expertos en este tipo de herramientas de Electrools. La potencia del motor de un taladro se mide en vatios. Los de menor potencia suelen tener unos 200 vatios, y ésta va aumentando poco a poco para aportar más fuerza al aparato. Algunos motores son sencillos, mientras que otros motores de los taladros son cajas de cambios que permiten aumentar las propiedades del taladro. Entre sus características principales encontramos la capacidad de cambiar la dirección de rotación, de ajustar la velocidad o de cambiar el par.

La velocidad y el par de los taladros puede cambiarse y ajustarse con un regulador. Cuanto más pequeña sea la velocidad, más grande será el par motor. Esto resulta especialmente importante en los taladros eléctricos atornilladores, ya que la velocidad necesaria para apretar tornillos es distinta a la que debe usarse para taladrar cualquier tipo de superficie.

Del mismo modo, los motores de los taladros no solo cuentan con la capacidad de girar, sino que también permiten golpear y martillar las superficies. Los golpes cambian según la potencia del motor y se valoran en golpes por minuto.

El resto de partes de un taladro dependerán del motor para poder moverse. Además, podemos encontrar motores de taladros con escobillas y sin escobillas. Los que no tienen escobillas son más potentes y pueden funcionar durante más tiempo.

El portabrocas o mandril

Otra de las partes más importantes de un taladro es el portabrocas, también conocido como mandril. Se trata de la parte del taladro que sujeta la broca. Casi todos los taladros eléctricos actuales incorporan portabrocas automáticos con dos partes diferenciadas que pueden aflojarse o apretarse con la mano.

Se trata de una parte del taladro que permite sostener el taladro y transmitir potencia al motor. Existen percutores con llave y percutores sin llave o automáticos. En los modelos con llave debemos usar una llave especial al cambiar de broca mientras en el modelo automático es posible cambiar la broca con ayuda de la mano y con la rotación del portabrocas del taladro. Para poner o quitar las brocas tenemos que girar el portabrocas de manera que podamos colocarla y ajustarla de manera sencilla a nuestras necesidades concretas.

Selector de la dirección de giro

Asimismo, entre las partes del taladro encontramos también el selector de la dirección de giro. Se trata de una palanca o tecla que se ubica sobre el gatillo y que se puede mover con el pulgar o con el índice. Este selector permite escoger la dirección de giro. Normalmente solemos taladrar en el sentido de las agujas del reloj, porque es el sentido de trabajo de las brocas del taladro.

Regulador automático de velocidad

Del mismo modo, también es una parte importante del taladro el regulador automático de velocidad. Se trata de una tecla que podemos presionar en los taladros eléctricos para mantener el gatillo a una profundidad determinada sin tener que hacer fuerza con los dedos. De esta manera, si tenemos que girar durante quince minutos a la misma velocidad, bastará con apretar esta tecla para poder usar el taladro de manera más cómoda.

Regulador de velocidad

Encontramos también el regulador de velocidad, que suele ser una pequeña rueda ubicada a mitad del gatillo que nos servirá para escoger la profundidad máxima que puede conseguir el gatillo, y por tanto la velocidad de rotación que es capaz de alcanzar el taladro que estemos utilizando.

Consejos para taladrar de forma segura

Ahora que ya conoces cuáles son las partes principales de un taladro, pasamos a reseñar algunos consejos y recomendaciones de los expertos para poder taladrar en todo tipo de materiales de manera segura.

Es importante, primero que nada, revisar que no pasa ningún tipo de instalación por el punto en el que vayamos a taladrar. No recomendamos perforar la vertical de una llave de paso, de un grifo, de una toma de radiador o de un enchufe en los dos lados de la pared.

Además, si vas a usar el taladro en casa o en el trabajo y no controlas bien las instalaciones, te recomendamos usar un detector de materiales para valorar si existe algún peligro tras el punto de la pared en el que quieres taladrar.
A la hora de usar el taladro, resulta fundamental equiparnos bien y contar siempre con el equipamiento y las medidas de seguridad recomendadas por los expertos (guantes, gafas...)

Si vas a usar un taladro eléctrico con cable, deberías revisar que éste cuenta con la longitud suficiente para poder hacer el trabajo sin contratiempos. En caso contrario, deberías buscar un alargador en buenas condiciones para poder usar el taladro de manera cómoda y segura.

Finalmente, es fundamental recoger el polvo siempre cuando uses el taladro. Para ello puedes usar un sobre o algún otro sistema de limpieza. Si vas a taladrar no dejes debajo cosas que sepas que pueden llenarse de polvo y si lo haces, límpialas lo antes posible para prevenir contratiempos.